Por Shayla Rexrode, arquitecta de Soluciones Educativas en Lenovo,
y Delia DeCourcy, gerente de Soluciones Educativas Globales de Lenovo
En Lenovo reconocemos que la continuidad educativa puede tener diferentes significados según la función que desempeñes en la enseñanza. Pero para muchos niños y niñas, la continuidad es sinónimo de colegio.
La COVID-19 ha causado una perturbación sin precedentes en los sistemas educativos de todo el mundo con el cierre prácticamente total de escuelas, universidades y facultades. Dado que la enseñanza a distancia se ha convertido en el principal modelo educativo durante esta pandemia, los profesores y responsables educativos han tenido que adaptarse y hacer malabarismos con demandas difíciles y contradictorias para garantizar los mejores resultados para los alumnos.
Desde marzo de 2020, el número de estudiantes de todo el mundo cuya experiencia educativa se ha visto afectada por la pandemia ha aumentado a un ritmo alarmante. En el punto álgido de la crisis, más de 1.500 millones de alumnos se vieron afectados por el cierre de colegios. Según UNICEF, la pandemia está afectando a más alumnos de primaria que a cualquier otro grupo, y estos son los estudiantes que más apoyo necesitan en cuanto al aprendizaje a distancia.
Algunos países han comenzado a reabrir las puertas de sus colegios. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer para abordar la pérdida de horas lectivas y el impacto social y emocional causado por el rápido cambio a la enseñanza a distancia. A pesar de los reveses infligidos por la COVID-19, los profesores, los responsables educativos y la enseñanza superior han innovado a un ritmo sin precedentes en un esfuerzo por proporcionar a los alumnos y sus familias una continuidad educativa. Independientemente de que el aprendizaje se realice a distancia, en un entorno híbrido o en persona, los educadores han estado a la altura de los desafíos que ellos y sus estudiantes han afrontado.
Los siguientes ejemplos de testimonios del Reino Unido, Italia y Estados Unidos, donde Lenovo se enorgullece de haber podido brindar apoyo o soluciones, reflejan la implacable determinación del personal docente de satisfacer las necesidades de cada estudiante, día tras días.
Aprendizaje a distancia en el Reino Unido: un día cualquiera
Para entender mejor cómo respaldar la transición al aprendizaje a distancia, Lenovo estuvo en contacto con profesores del Reino Unido la primavera pasada para conocer sus experiencias sobre permanecer conectados e interactuar con los alumnos durante el confinamiento. Hablamos con Joss, profesor de geografía; Gareth, profesor de sexto curso en Surrey, y Elly, profesora de primero en Oxford.
Joss: «Si te describo mi jornada ahora y cómo sería en el colegio, es muy similar a lo que vivía antes del confinamiento y, al mismo tiempo, totalmente diferente. A las 08:30, paso lista a mis chicos. Uso un Chromebook y tenemos Google Meet, con un pequeño chat en vídeo que nos brinda una gran oportunidad para comprobar cómo se encuentran. También para asegurarnos de que están ahí, despiertos y listos para aprender-
Gareth: «En este momento estamos usando diversos sitios web. Los niños se conectan por las mañanas y encuentran listas de tareas personalizadas, que pueden realizar a su propio ritmo».
Elly: «Ya no enseño en el aula, sino que lo hago desde casa, a través de un ordenador… dependemos de la tecnología para estar conectados. ¡La tecnología es increíble! Y realmente nos permite ayudar a los niños de maneras que, sin ella, no podríamos lograr. Las videoconferencias y las videollamadas se han convertido en la nueva norma. Creo que, sobre los dispositivos, es muy importante que tengan una cámara de buena calidad para estas videollamadas, para no estar mirando a una mancha pixelada en la pantalla».
Estas serán situaciones familiares para los profesores y educadores de todo el mundo, que han tenido que adaptar sus prácticas de enseñanza, pero ¿qué hay de las comunidades cuyos colegios tienen pocos recursos? ¿Cómo se han asegurado de que los alumnos tengan dispositivos y acceso Wi-Fi para poder seguir aprendiendo durante el confinamiento?
Reducir la brecha digital en Italia
Cuando los colegios empezaron a cerrar sus puertas en Milán, el alcalde, Giuseppe Sala, buscó apoyo en un sistema de aprendizaje digital eficiente. Al reconocer que se trataba de una crisis comunitaria, pidió a las empresas y organizaciones que «donaran material y herramientas de aprendizaje electrónico a los colegios, para que los niños que no tienen acceso a dispositivos puedan seguir las clases junto a sus compañeros».
«Un colegio no es solo un edificio, sino, sobre todo, una comunidad creada por los profesores y los alumnos, en colaboración con las familias. Hemos descubierto que la educación se puede facilitar de nuevas maneras y en nuevos espacios, pero todo el mundo tiene que estar en la misma página.» Laura Galimberti, consejera de Educación de Milán
Patrizia Forcato, gerente administrativa de uno de los colegios, comentó que esta iniciativa es un ejemplo de verdadera sinergia entre la escuela, las familias, los departamentos de servicios sociales de los municipios locales y el mundo empresarial.
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