Denunciando la política de recortes del Gobierno central
Los Rectores han solicitado "que la educación superior, la investigación, el desarrollo y la innovación, que van intrínsecamente unidas entre sí, sean consideradas como una inversión y no como un gasto y que las universidades españolas, tal y como ha solicitado recientemente la Asociación de la Universidad Europea (EUA) a los Jefes de Estado y de Gobierno europeos, tengan una financiación pública suficiente y sostenible y se fortalezca la autonomía universitaria para que puedan diversificar sus fuentes de ingresos sin obstáculos."
Los 50 responsables de los centros universitarios públicos que han firmado el manifiesto, junto con los de la Universidad de Vic y la Oberta de Cataluña -ambas privadas–, muestran su voluntad de colaboración con las administraciones públicas para ayudar a resolver "este grave problema económico", también avisan de que si las universidades pierden calidad, lo harán asimismo la investigación científica, la innovación tecnológica y la formación. "No perderán sólo las universidades, sino que perderemos todos, el conjunto de la sociedad"; subrayan.